Yendo por León, pueden encontrarse exposiciones tan bellas como la que muestro en la fotografía: Raíces: el legado de un reino, promovida por el Ayuntamiento de la ciudad y la Consejería de Cultura de la Junta de Castilla y León. La expo, que narra al detalle la cronografía del antiguo Reino de León, ha sido anunciada en toda la ciudad con una publicidad exterior dotada de un diseño que no deja indiferente a nadie.
En primer lugar, el flyer que obtuve en la exposición me dejó prendado: una especie de catarata con un montón de leones, pintados a usanza de cada época del Reino Medieval, con una iconografía típica de cada época. En el centro de la cascada, los leones simbólicos tienen color, que se va apagando y pasando al gris conforme va descendiendo la manada que forma la composición. Muy llamativo en formato flyer, y aún más en la carpa que presenta la exposición en el Palacio del Conde Luna de la ciudad de León.
El anagrama de la exposición es realmente interesante, diseñado para un target amante de la historia: un león rampante a estilo de un relieve bizantino tallado en piedra, sobre unas letras de tipo “manual” que van en consonancia estética con el estilo de relieve en piedra.
Aún más llama la atención la tipografía del título de la expo, que me deja con un sabor agridulce: por un lado, aprecio la labor creativa de dotar una tipografía de palo seco de motivos que imitan lo vegetal, y largas extensiones de las letras que nos recuerdan la tendencia románica. Sin embargo, la lectura del título no es tan fácil: vista de lejos, parece decir “RAÍCES: EL LEGADO DU REINO”.
En un principio, pensé que “du reino” se debía a que el título de la expo estaba redactado en idioma leonés. Tras acercarme para apreciar mejor la tipografía, caí en la cuenta de que dentro de la D está la Cruz de Pelayo, invertida en forma de E mayúscula. Dentro de la U, hay una N mayúscula. No entiendo este ejercicio de sintetizar el artículo “de” y el adverbio “un”. Además de ello, tras la consulta posterior de fuentes entendidas, “El legado de un reino”, en leonés, sería “El legáu d'un Reinu”.
Detalles aparte, la exposición es de una brillantez histórica exquisita. Me permito dejar aquí unas fotos para motivar a quien se pase por León a que vaya a verla. Simplemente genial.
En primer lugar, el flyer que obtuve en la exposición me dejó prendado: una especie de catarata con un montón de leones, pintados a usanza de cada época del Reino Medieval, con una iconografía típica de cada época. En el centro de la cascada, los leones simbólicos tienen color, que se va apagando y pasando al gris conforme va descendiendo la manada que forma la composición. Muy llamativo en formato flyer, y aún más en la carpa que presenta la exposición en el Palacio del Conde Luna de la ciudad de León.
El anagrama de la exposición es realmente interesante, diseñado para un target amante de la historia: un león rampante a estilo de un relieve bizantino tallado en piedra, sobre unas letras de tipo “manual” que van en consonancia estética con el estilo de relieve en piedra.
Aún más llama la atención la tipografía del título de la expo, que me deja con un sabor agridulce: por un lado, aprecio la labor creativa de dotar una tipografía de palo seco de motivos que imitan lo vegetal, y largas extensiones de las letras que nos recuerdan la tendencia románica. Sin embargo, la lectura del título no es tan fácil: vista de lejos, parece decir “RAÍCES: EL LEGADO DU REINO”.
En un principio, pensé que “du reino” se debía a que el título de la expo estaba redactado en idioma leonés. Tras acercarme para apreciar mejor la tipografía, caí en la cuenta de que dentro de la D está la Cruz de Pelayo, invertida en forma de E mayúscula. Dentro de la U, hay una N mayúscula. No entiendo este ejercicio de sintetizar el artículo “de” y el adverbio “un”. Además de ello, tras la consulta posterior de fuentes entendidas, “El legado de un reino”, en leonés, sería “El legáu d'un Reinu”.Detalles aparte, la exposición es de una brillantez histórica exquisita. Me permito dejar aquí unas fotos para motivar a quien se pase por León a que vaya a verla. Simplemente genial.
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